La Pedals de Foc puede ser la primera y desde luego es la más conocida de la rutas de la franquicia Pedales del mundo. Desde Viella (Vielha, nombre oficial en occitano) rodea el parque de Aigüestortes y Sant Maurici.
En mi primer día amanezco con las nubes tapando las
montañas. El tiempo es dudoso aquí en Viella, donde me recoge un taxi que me
deja en la boca sur del túnel, junto al refugio de Conangles. Y para mi
sorpresa llueve, y mucho además. En estas condiciones y porque no me queda otra,
comienzo a pedalear chorreándome agua por todos lados. Vadeo un primer
arroyo que baja muy crecido, vadeo un segundo y un tercero, pero este cubre más
de lo pensado y el agua y las piedras me mandan a mi por un lado, a la bici por otro y el GPS por otro. Por un
momento pienso que se me ha acabado el viaje pero afortunadamente no pasa nada.
Un poco más adelante deja de llover, vuelve a llover a ratos y así, por
un técnico y mojado sendero, llego hasta al Coll de Sarreras, uno
de los pasos a la Val de Boí, con alguna
que otra caída por resbalón, muy aparente pero sin consecuencias. Continuo por una
bajada divertida pasando por pueblitos con esas iglesias románicas tan bonitas
que por algo son patrimonio de la UNESCO. Subida final al Coll y emita de Sant
Salvador, con vistas espectaculares para continuar sin contratiempos
hasta Castellars. Estoy solo en el alojamiento, imagino que por eso, me
trataron como a un marqués
Segundo día, hoy un
poco más corto. Para desayunar me espera una subida por pista al Coll de
Peranea, con más de 700 metros de
desnivel mantenidos, atravieso después algunos poblados pequeñitos en
mitad de ningún sitio hasta el último collado de hoy, el Coll d`Oli .Un curioso
pasaje lunar de tierra roja no ciclable que da paso a la Val Fosca y donde
comienza el descenso que me dejará en Espui