martes, 5 de marzo de 2024

Kosovo y Albania con esquís. Parte 1. Kosovo.Febrero 2024


   Viajar a los Balcanes es viajar a una Europa desconocida, exótica y de reciente y turbulento pasado

   Y con un pequeño problema empezamos, pues Begoña y yo nos quedamos tirados en Frankfurt y llegamos a Tirana un día más tarde, así que tuvimos que buscarnos la vida para llegar al día siguiente a Pizren, ya en Kosovo. Una bonita ciudad turística donde  nos llama la atención  la bandera albanesa omnipresente y las estatuas de sus héroes de la reciente guerra de Kosovo. Curioso lugar,  de mayoría musulmana pero con varias iglesias ortodoxas, lo que nos recuerda que para los serbios es el centro de su muy influyente iglesia, incluso llegó a ser su capital en el siglo XIV

    En nuestro destino siguiente, el pueblo de Dragash la influencia musulmana es más importante, no hay alcohol y nos costó encontrar donde tomar una cerveza. Enfrente del  hotel teníamos el local de los veteranos del   UCK (Frente de Liberación de Kosovo). Repasar su historia reciente impacta

   En cuanto a las montañas, nos movemos estos días por los montes Sar (me disculpo, no sé escribirlo correctamente), que hacen muga con Macedonia del Norte. El tiempo no nos acompañó en esta parte del viaje. El primer día el grupo solo pudo hacer un intento bajo  la lluvia. Al día siguiente tuvimos mejor suerte pero se cerró la niebla cerca de la cumbre  y tuvimos que bajar con ayuda del GPS pero con buena nieve. Nuestro tercer día nos acercamos a Arxhena, una muy pequeña estación de esquí,  pero  el mal tiempo tampoco nos permitió alcanzar nuestro objetivo, pero volvimos a tener un  estupendo descenso.

   Disrutamos mucho de este viaje y de su cultura , que apenas arañamos. No solo de sus montañas. Nos encontamos un grupo muy bien avenido y por si fuera poco, al final del día  nos esperaban unas cenas con una tremenda cantidad de comida donde prima la carne. Mucha carne. Nuestros anfitriones no sabían que hacer para agasajarnos